¡Buenos días!
Tenía unas ganas
tremendas de publicar esta reseña, y es que es la segunda parte de un primer
libro que me enamoró. Quien me conozca adivinará que los leí del tirón (la
paciencia no es lo mío cuando algo me gusta), pero la reseña se ha hecho más de
esperar. Ya dije que el primer libro, Presa de su objetivo: Libro 1 (reseña aquí), me
enganchó y me pareció interesantísimo (tanto que voy a volver a leerlo...). En él, Cora Spark aborda un tema muy polémico, pero lo hace con tal
tacto que conforme la historia se desarrolla solo puedes pensar: “no podía ser
de otra manera”.
Robin es una joven madura, con las cosas claras, pero con la
inocencia de la edad; mientras que Nolan es un tipo que ha vivido mucho. Si se
hubieran conocido con la misma edad, seguramente se hubieran repelido. Por eso
tenían que encontrarse ahora, con 20 años de diferencia. Por eso ahora son como
dos piezas de un puzle que tiene que encajar, a pesar de todas las personas en
su entorno que se empeñan por separarlas.
El primer libro terminó
con Robin y Nolan separados por ciertas circunstancias. Así que la pregunta
está en el aire: ¿Qué pasa con ellos ahora? Han pasado por tanto que no se
pueden rendir, ¿no?
Robin ha sido enviada por su padres a Alaska,
apartándola de las malas influencias que, sus padres consideran, ha conocido el
verano anterior.
Luchando por no perder la cabeza y la convicción porque logrará salir de allí y ser dueña de su vida busca la forma de poder contactar y comunicar dónde se encuentra.
Nolan se siente culpable por no haber impedido que le arrebatasen a su novia, y trata por todos los medios de dar con ella y poder ir en su busca, sin perder la esperanza tras el tiempo transcurrido.
Una simple pista le hará no dudar en cruzar medio continente y recuperar al que, para él es, el amor de su vida, contando con sus mejores amigos como acompañantes.
Ese es el desencadenante del reencuentro vehemente de un amor apasionado.
Cuando por fin la pareja pueda dar rienda suelta a la pasión y deseo que se procesan comprenderán que habrá mucho más a lo que hacer frente que los prejuicios por la diferencia de edad.
Un adulto con un pasado que regresa, una joven solo quiere mirar al futuro y... un amor que está dispuesto a luchar contra todo y todos.
OPINIÓN PERSONAL
Esta segunda parte me
pareció igual de adictiva que la primera. Temía un poco que el ritmo decayera,
porque al fin y al cabo ese momento en que ambos se van conociendo y el proceso
de enamoramiento ya estaba finiquitado. Sin embargo, a estos pobres
protagonistas les esperan varios obstáculos más que superar. Los padres de
Robin solo quieren lo mejor para ella, por eso toman las decisiones por ella
misma y la alejan de todo lo conocido, aislándola hasta tal punto que ni su tía
ni su mejor amiga ni, por supuesto, Nolan, saben dónde está.
Así comienza esta
segunda parte. ¿La encontrará Nolan? ¿Conseguirá ella escaparse?
Me da pena no poder
contar nada, pero no quiero spoilers. Aún así, tengo que decir que no te quedas
insatisfecho con el libro, porque el grueso del mismo transcurre con ellos dos
juntos y enfrentándose a más obstáculos e imprevistos. Su relación sigue igual
de fuerte, y a cada momento te sorprende todavía más la madurez con la que
Robin afronta todo lo que se le está viniendo encima; y el amor y comprensión
de Nolan, quien me ha vuelto a enamorar con su dulzura; eso sin dejar de lado su lado malote y un poco pasota reformado.Ay Nolan...
Las circunstancias no hacen más que atar el nudo entre ellos y
hacerles más fuertes. Me ha encantado. Es como si toda la incomprensión, los
prejuicios de la sociedad, y las sorpresas (no siempre buenas) no hicieran más
que acercarles.
Buscan su refugio en el otro. Me ha parecido como si el mundo
exterior no parara de lanzarles pruebas y ellos son capaces de sortearlas a su
manera.
Vuelve a aparecer la tía
Meredith y Sharon, quien poco a poco se va haciendo a la idea de la relación
entre su hermano y la niñera. Pero también llegan nuevos personajes igual de
importantes y bien definidos y, sobre todo, que nos harán sospechar y estar pendientes de ellos.
Desde luego, esta segunda
parte es el cierre perfecto para esta bilogía. Yo la he disfrutado de principio
a fin, y si te ha gustado la primera parte es imposible que no te guste esta
segunda.
La pluma de Cora Spark
sigue siendo fluida y muy cuidada. Los momentos, narrados con mucha sutilidad,
y los personajes tan bien definidos y tan entrañables que se te meten bajo la piel
sin poder remediarlo.
A raíz de lo que me gustó
esta bilogía, decidí leer una primera novela corta que publicó Cora Spark
llamada Un encuentro de altos vuelos. Si todavía no te atreves con la bilogía
completa, te recomiendo que eches un vistazo a esta historia. Es corta, pero
profunda, y te dejará con ganas de más.
¿Y tú? ¿La has leído? ¿Te
ha gustado?
Aquí os dejo algunos
fragmentos que rescaté durante la lectura:
“- Lo que deseo y quiero
eres tú – susurró sin apenas apartarse de mis labios -. El resto me da igual.”
“- A mí me tienes –
declaré -. Pero quiero que nunca te lamentes por nada…”
“- Amo la vida a tu lado –
dijo incorporándose y quedando sentada sobre mis caderas -. La vida así… tal y
como nosotros la sentimos y hacemos: a nuestra manera.”
¡Un saludo y feliz domingo!